31 diciembre 2010

ADIOS 2010...


Adiós a un año de sinsabores.

Adiós a un año de cambios.

Adiós a un año de novedades.

Adiós a un año de despedidas.

Adiós a un año de nuevas amistades.

Adiós a un año de superación.


Hola 2011, serás un nuevo reto para mi.
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24 diciembre 2010

MI CENA de NOCHEBUENA...


Amélie (título original: Le fabuleux destin d'Amélie Poulain)
Comienza con una voz en off que narra la niñez de Amélie, la cual creció aislada del resto de los niños por decisión de su padre, debido a su equivocada creencia de que ella sufría problemas cardíacos (equivocado pues cada vez que él le hacía un chequeo médico en casa, el corazón de Amélie se disparaba simplemente por el contacto físico con su padre, ya que él normalmente nunca era afectivo con ella). Este hecho, junto con el ambiente tenso que imperaba en su casa debido también a la naturaleza inestable y nerviosa de su madre, y sobre todo por la trágica muerte de ésta al caérsele encima una turista suicida que se lanzó al vacío desde lo alto de la iglesia de Notre Dame, lo que agudizó las tendencias antisociales de su padre, hacen que la niña desarrolle una inusual y activa imaginación. Como se cita textualmente en la película, “en tal casa de la muerte, Amélie crece y prefiere soñar hasta que llegue el día de partir”. Amélie cumple 22 años y deja su casa para instalarse en un apartamento en Montmartre que se costea trabajando como camarera del "Café des 2 Moulins” (café los 2 molinos). Allí se da a conocer una serie de personajes de lo más excéntricos con los que Amélie interactuará durante toda la película:
. Suzanne, la dueña, antigua artista del desnudo, que cojea un poco pero nunca derrama nada, a la que le gusta ver a los atletas que lloran por desilusión y no le gusta que un hombre sea humillado en presencia de su hijo.
. Georgette, la vendedora de tabaco hipocondríaca, la cual odia la frase “el fruto de su vientre”.

. Gina, camarera como Amélie, cuya abuela era sanadora, y a quien le gusta hacer tronar los huesos de los dedos.

. Hipólito, un escritor fracasado, a quien le gusta ver toreros corneados en televisión.

. Joseph, el amante rechazado de Gina, quien se pasa espiándola todo el día y a quien sólo le gusta explotar el papel de burbujas.

. Philomène, azafata de vuelo, a quien le gusta el ruido producido por el tazón del gato en el azulejo, al cual le gusta oir historias para niños.

Amélie no tiene novio, lo intentó una o dos veces, pero los resultados la desanimaron. En su lugar Amélie ha cultivado un gusto por los pequeños placeres, como: meter la mano en un saco lleno de legumbres, romper la capita de azúcar caramelizado de una crema catalana con una cuchara, verle la cara en la oscuridad en el cine a la gente, lanzar piedras en el canal de San Martín o tratar de adivinar cuántas personas hacen algo en un determinado momento.

Pero el 30 de agosto de 1997 ocurre el evento que cambiará la vida de Amélie. Tras una serie de circunstancias por el shock ocasionado al enterarse por televisión del accidente de Lady Di, descubre tras una losa de su baño el pequeño tesoro guardado por un niño hace cuarenta años. Fascinada por el hallazgo, el 31 de agosto a las 4:00 de la madrugada, tiene una idea espectacular: dondequiera que esté, Amélie encontrará al dueño y le devolverá su tesoro. Si lo conmueve, se convertirá en una vengadora del bien. Si no, pues no.
Con la ayuda de su vecino Raymond (un anciano conocido como “el hombre de cristal” por la debilidad de sus huesos, que lleva 20 años sin salir de casa y que sólo ve el mundo a través de la reproducción de un cuadro de Pierre-Auguste Renoir) y tras una larga búsqueda por toda la ciudad, Amélie consigue finalmente localizar al dueño del tesoro y devolvérselo de forma casual tras una estrategia muy original. El dueño no sólo se emociona profundamente al descubrir que toda su infancia estaba en esa cajita, sino que además se plantea mejorar su vida actual.
En ese momento Amélie tiene una sensación de completa armonía y decide volcarse hacia los demás para crearles felicidad en sus vidas.




La tienda del Sr. Collignon, Rue des Trois Frères, París.

De esta forma, inventa toda clase de estrategias de lo más originales y conmovedoras para intervenir, sin que se den cuenta, en la existencia de varias personas de su entorno.

. Como cuando agarra del brazo a un ciego vagabundo y le da un rápido pero intenso paseo por un mercado mientras le susurra al oído todo lo que ella va viendo, produciendo en el ciego un estado de emoción inmesurable.

. Cómo le hace olvidar a Georgette su carácter hipocondríaco y a Joseph su desdichada obsesión por Gina al provocar Amélie una situación de romance de lo más pasional entre ambos.

. Cómo se venga del cruel frutero de su barrio quien humilla constantemente a su joven ayudante dejándolo en ridículo delante de todo el mundo.

. O como cuando consigue sacar a su vecino Raymond de la obsesión por el cuadro de Renoir mediante el envío anónimo de videos donde se muestran hermosas escenas de lo más curiosas, que producen en el anciano una inmediata necesidad de expandir su mente más allá de lo que había hecho antes.

. Y cuando Hipólito vuelve a cobrar ilusión por su literatura al descubrir una de sus estrofas pintada en una pared de la calle: “Sans toi, les émotions d’aujourd’hui ne seraient que la peau morte des emotions d’autrefois” ("Sin ti, las emociones de hoy no serían más que la piel muerta de las de ayer").

. Y sobre todo cuando, valiéndose de un gnomo de piedra, de jardín, a quien su padre tenía especial cariño, logra que éste por fin decida hacer las maletas y emprender un viaje por el mundo.

Pero mientras todo esto sucede y nadie se preocupa por Amélie, ella se ve forzada de forma involuntaria a examinar y valorar su vida solitaria. Este sentimiento se agudiza especialmente tras conocer a Nino, un chico tan raro y soñador como ella, que trabaja medio día en “el tren del horror” y el otro medio en un sex shop, que colecciona las fotos que la gente va desechando en los fotomatones. Amélie siente fascinación por Nino pero prefiere un encuentro casual a una presentación directa. Lo intenta varias veces sin éxito y acaba dejándolo por imposible. Pero finalmente Raymond, le corresponde con la misma moneda a Amélie, incitándola a buscar lo que había dejado en un segundo plano: su propia felicidad. Así, Amélie, acaba felizmente en los brazos de Nino al que besa de la forma más sutil y complaciente que se pueda imaginar.

23 diciembre 2010

EXCENTRICISMOS...


Gaga, obligada a suspender dos veces su concierto parisino debido a los problemas con el mal tiempo y a la huelga de transportes, no dudó en salir de compras medio desnuda. Con una cazadora de cuero, unas medias de rejilla y unos tacones, entró en la tienda de la firma Bruce Field, junto al Palais Royal.

20 diciembre 2010

MY NEW OLD CAM...

Though Polaroid had considered a Henry Dreyfus-designed SLR for its Colorpack film, the SX-70 was the first instant SLR and the first camera to use Polaroid's new SX-70 integral print film, which developed automatically in broad daylight without the need for intervention from the photographer. The SX-70 was also notable for its elegant folding design, which allowed the camera to be compact enough to fit a man's suit-jacket pocket when collapsed.

There were a variety of models beginning in 1972 with the original SX-70, though all shared the same basic design. The first model, sold in Florida in late 1972, had a plain focusingscreen (the user was expected to be able to see the difference between in- and out-of focus) because Dr. Land wanted to encourage photographers to think they were looking at the subject, rather than through a viewfinder. When many users complained that focusing was difficult, especially in dim light, Dr. Land was forced to include a split-image rangefinder prism of the kind used on 35mm SLR focusing screens. This feature is standard on all later models.

The later Sonar OneStep and SLR 680 models were equipped with a sonar aotofocus system, which permitted returning to the plain focusing screen. The Sonar Onestep models were the first autofocus SLRs available to consumers. Polaroid Corporation marketed this relatively inexpensive, novel sonar technology as a set of components to hobbyists in order for them to incorporate distance sensing into other systems. The later SLR 680/690 models updated the basic design of the Sonar Onestep to more modern standards by incorporating support for newer 600 cartridges instead of SX-70 cartridges, and a built-in flash instead of the disposable Flashbar. Today they are the most evolved forms of the SX-70, and are highly sought after by Polaroid enthusiasts


( Y yo ahora tengo una !!!! )

10 diciembre 2010

MI ESTRENO BOLLYWOOD...


Domingo, 12 de diciembre · 18:30 - 23:00

Casinet de Hostafrancs
Rector Triado
Barcelona, Spain

03 diciembre 2010

SHOPPING NIGHT...


Anoche las tiendas del Paseo de Gracia de Barcelona abrieron hasta las doce de la noche al celebrarse la primera Shopping Night, un acontecimiento que pretende promocionar este importante paseo comercial y posicionar Barcelona como destino de compras.

02 diciembre 2010

CRISIS GLOBAL...

Cuba pide a los espectadores de béisbol que devuelvan las pelotas

La consigna del ahorro a toda costa llega al béisbol cubano: que nadie se lleve a su casa una pelota capturada al vuelo en las gradas

La política de austeridad en Cuba no tiene límites. No sobran ni pelotas, según advirtió un comentarista deportivo al inaugurarse la temporada de béisbol. El periodista, siguiendo indicaciones del Gobierno, hizo un dramático llamamiento a los aficionados para que devuelvan las bolas que los bateadores consiguen lanzar hasta las gradas: unas veinte en cada uno de los 740 encuentros de la liga nacional, según sus cálculos.

"¿Saben cuánto le cuesta cada pelota al país?", preguntó el comentarista. "¡7,2 dólares!", respondió. "Una simple multiplicación –siguió– nos da que las pelotas que no vuelven suman casi 110.000 dólares. Así que meditemos sobre estas cifras y que se devuelvan todas las pelotas en los estadios. Es un deber de todo ciudadano amante del béisbol".

Pero el béisbol no es una broma en Cuba. Y la devolución de una pelota capturada al vuelo en disputa con otros espectadores representa un sacrificio: uno más entre los que Raúl Castro y su gobierno están pidiendo a la población para afrontar la crisis.

En espera de conocer la respuesta del personal a la hora de la verdad, de momento las opiniones de los adictos son muy diversas. "¿Devolver las bolas, con lo caras que son? Negativo, amigo". O "ni lo sueñe", dijeron quienes hablaron bajo la certeza del anonimato. Más cautelosos se mostraron los consultados ayer en la esquina caliente, de Parque Central, el rincón donde los fanáticos discuten a voz en cuello los pormenores de cada partido. "Siempre habrá algún indisciplinado, pero claro que se devolverán", aseguró Leonel Pérez, de Granma. "Seguro", confirmó Juanito Contreras, de Guantánamo; "En las provincias orientales lo hacemos siempre, y antes se hacía en todo el país". Es cierto, según verificaron varios especialistas.

La Historia del béisbol es un espejo de la de Cuba en tiempos recientes, incluido en lo relativo a la actitud de los seguidores. Hay distintas versiones de cuándo y por qué los aficionados abandonaron su sentido del socialismo pelotero y empezaron a quedarse con las bolas: que si fue a raíz de un encuentro con la selección venezolana en que la afición rival se llevó a casa unas cuantas; que si todo empezó cuando se decidió cobrar la entrada (1 peso cubano, unos 3 céntimos de euro); que si las pelotas de importación utilizadas en los partidos eran mucho mejores que las de fabricación nacional, las cuales se abombaban y saltaban en pedazos a los pocos golpes de bate…

El béisbol sigue reinando en la mayor de las Antillas. Pero ahora compite a muerte con otro deporte. "¿Qué le pareció el partido del lunes", me preguntan en la esquina caliente. "Disculpe, no sigo el béisbol?", respondo. "¡Pero qué dice! Le hablo del Barça-Madrid, me corrigen. "¡Qué cosa más grande!". No hay que aguzar mucho el oído para comprender lo que está pasando en la cotidiana trifulca del Parque Central de La Habana. Allí no se debate ya sólo de béisbol. El fútbol gana terreno día a día. Cuba está cambiando; también sus aficiones.

01 diciembre 2010

EXPOSICION AFGANISTAN...

'Exposición:

Este proyecto expositivo presenta el trabajo de fotógrafos que exploran un país sumido en un conflicto de incierta solución desde hace más de treinta años. Los autores de las imágenes han realizado reiteradas estancias en Kabul, Kandahar, Mazar-e Sarif, Herat, Jalalabad y Kunduz, entre otras ciudades, en busca del instante irrepetible que han capturado hasta convertirlo en historia.

El proyecto expositivo explora Afganistán a través de soportes como la fotografía, el vídeo y la fotoinstalación (a cargo de Guillermo Cervera, François Fleury y Rubén Guillem), por un lado, y el relato periodístico (Plàcid Garcia-Planas y Guillaume Fourmont-Dainville) y el relato literario (Atiq Rahimi), por el otro. También incluye una cuarentena de retratos anónimos de afganos hechos en estudios de Kabul y coloreados manualmente, que se podrán ver por primera vez en una sala de exposición.

El circuito expositivo empieza con 20 imágenes en color de mediano y gran formato (8 y 12, respectivamente), y un vídeo monocanal y un diaporama con más fotos en pantalla de Guillermo Cervera, seguido de tres relatos que se presentan sobre un soporte audiovisual: Historia del hombre que quiso modernizar a los afganos, ¿Por qué llevas burka? y En el valle talibán de Arghandab, de Garcia-Planas. A continuación, se exhiben los 43 retratos anónimos de afganos, obtenidos en Afganistán por Fleury, Fourmont-Dainville y el coleccionista Cyrille Moleux, y que son muestra del patrimonio fotográfico del país. La tercera parte de la exposición presenta las 11 fotografías de François Fleury, en blanco y negro, junto con una fotoinstalación que incorpora la serie de relatos inéditos de Guillaume Fourmont-Dainville titulada Los afganos.

El gran novelista afgano Atiq Rahimi, premio Goncourt 2008, aporta a la exposición un extracto de su novela El regreso imaginario, que cierra el recorrido por la sala principal de exposiciones (2ª planta). La muestra se completa en la Planta Noble del Palacio Baró de Quadras (1ª planta) con las 13 fotografías del fotógrafo Rubén Guillem.

Fecha
30/11/2010 > 26/03/2011
Horario
Inauguración: martes, 30 noviembre de 2010, a las 19.30 h
Abierto desde el 1 de diciembre de 2010
Lugar
Sede de Casa Asia
Sala de exposiciones 2ª planta
Av. Diagonal, 373
Barcelona

Entrada
Entrada gratuita